El Real Colegio Seminario de Corpus Christi comenzaba el miércoles 12 de enero el triduo en honor a san Juan de Ribera, fundador de El Patriarca. Como es tradición, la eucaristía fue presidida por un antiguo colegial, en este caso José Ignacio Llópez Guasp, director del Colegio Imperial de Niños Huérfanos de San Vicente Ferrer.

El jueves tuvo lugar la segunda jornada de celebraciones y el encargado de presidir la eucaristía en la capilla mayor del Real Colegio Seminario fue Juan Antonio Navarro Tarín, párroco de san Miguel Arcángel de Gata de Gorgos.

El último día del triduo fue el viernes 14 de enero de 2022, fecha en la que se conmemora la festividad litúrgica por san Juan de Ribera. 

Esta jornada se abrió con el rezo de laudes cantados en gregoriano por el coro del Patriarca. Tras la oración, el rector del Colegio Seminario, Juan José Garrido, presidió una solemne eucaristía que también tuvo cánticos gregorianos. Garrido estuvo asistido en la celebración por los colegiales Ignacio Martín, que ejerció como diácono, y Pablo Morales, que lo hizo como subdiácono.

Por la tarde, se desarrollaron unas vísperas solemnes y en polifonía en las que el coro del Patriarca estuvo acompañado por algunos de los niños de la Escolanía de la Virgen de los Desamparados, así como por su director, Luis Garrido.

Las vísperas dieron paso a la última misa del triduo presidida por un antiguo colegial. En esta ocasión fue el párroco de San Juan de la Ribera, Martín Ramón Martín Noguera. En la celebración fue asistido por los colegiales Román Mil e Ignacio García.

Tras la eucaristía, el coro del Real Colegio Seminario y los niños de la Escolanía interpretaron los Gozos a san Juan de Ribera, compuestos por Francisco Peñarrocha.

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SAN JUAN DE RIBERA

San Juan de Ribera nació en Sevilla en 1532, estudió en la universidad de Salamanca, de la que fue profesor hasta 1562, fecha en la que fue nombrado obispo de Badajoz. A los 35 años de edad fue nombrado arzobispo de Valencia por el papa San Pío V que le otorgó el título de Patriarca de Antioquía. En Valencia “fue el alma de la restauración espiritual de la diócesis valentina al aplicar las directrices del Concilio de Trento”.

En los 42 años que fue arzobispo de Valencia, entre 1569 y su fallecimiento en 1611, recorrió 11 veces la diócesis, hizo 2.715 visitas pastorales a sus parroquias, de las que dejó constancia en 91 volúmenes con 92.000 páginas, celebró siete sínodos o reuniones con todos los párrocos.

El propio papa Pío V lo definió como “lumbrera de toda España, singular ejemplo de virtud y de bondad, dechado de gloriosas costumbres y santidad… porque no sólo hace oficio de obispo sino de cura”.

Durante su pontificado como arzobispo de Valencia, el más largo de la diócesis valentina, fundó el Real Colegio Seminario de Corpus Christi, así como la orden religiosa de las agustinas descalzas. Fue beatificado por Pío VI en el año 1796 y canonizado por san Juan XXIII el 12 de junio de 1960.